Mi propia web 

Soy de esas personas que cumple siempre sus promesas, aunque nunca se sabe cuándo. Así que a veces me pregunto si cumplir una promesa tarde viene a ser como no cumplirla. De cualquier forma, cuando las promesas me las hago a mí mismo, que son la mayoría, la decepción también es conmigo mismo, así que la puedo sobrellevar más o menos. Una de esas promesas que llevo haciéndome más de diez años es abrir mi propia web. Y ha llegado el momento.

Tengo unos ahorros y un poco de tiempo libre por primera vez en siglos. Aunque siempre supe que quería tener mi propia web, nunca supe muy bien hacia qué ámbito dirigirlo de entre mis variados intereses. Al final, me he decidido por el coaching y el crecimiento personal aprovechando la experiencia que tengo en el tema. Pero en lo que no tengo nada de experiencia es en diseño y puesta en marcha de una web.

Hace tiempo estuve ofreciendo unas charlas en unos centros con estudiantes e hice amistad con un chico que estaba a punto de terminar su Grado Experto en Diseño Digital Madrid. Me dijo que si alguna vez necesitaba ayuda para algún proyecto dentro de su sector que contara con él. Así que se me ocurrió que podía ser la persona indicada para, al menos en un principio, ayudarme a poner en marcha mi proyecto. Y es que sé más o menos lo que quiero, pero no tengo ni idea de cómo se hace.

Para empezar, necesito una imagen muy potente en la web, algo llamativo que esté en la línea de lo que se lleva hoy en día en diseño digital y web pero que tampoco sea repetitivo o copie a nadie. Eso, por un lado: pero es que ni siquiera sé cómo se compra un dominio y se abre un WordPress que, en principio, y por recomendaciones de algunos compañeros, será el gestor de contenido que use para alojar los posts. 

La aparición del chico que ya ha terminado su Grado Experto en Diseño Digital Madrid ha sido un balón de oxígeno, exactamente lo que buscaba ya que viene con buenas ideas y, sobre todo, conocimiento técnico que es lo que necesito ahora para cumplir esta vieja promesa.