Cuando vemos un producto que no conocemos de nada en un escaparate, tal vez nos llame la atención. Pero si no sabemos cómo funciona o para qué sirve, no le daremos demasiadas vueltas al tema. Incluso si nos dicen qué es y qué utilidades tiene, si no hemos escuchado hablar previamente de esas cosas, es decir, si no pertenece al grupo de los productos anunciados en tv vamos a sentir un poco de desconfianza.
“Tan bueno no será cuando no se anuncia en la tele” o “A saber de dónde ha salido esto”. Estas son solo algunas de las reacciones habituales ante algo nuevo en una estantería del supermercado que no hemos visto antes, o ante un aparato de tecnología que no conocemos. La televisión es como una garantía de que lo que está en la estantería es de verdad, es algo serio y es posible que funcione.
La realidad es que no todo lo que se anuncia en televisión tiene que ser necesariamente bueno. Un anuncio en la tele no garantiza nada. Simplemente, el fabricante rueda un spot y paga para que se emita. Pero todos tenemos la tendencia a pensar que si lo que nos dice el anuncio no es cierto, no estarían poniéndolo en la televisión.
Las cadenas de televisión no fiscalizan la publicidad. Pueden exigir ciertas cosas a sus anuncios, como que sean para todos los públicos, pero no pueden comprobar que lo que se dicen en ellos es cierto. No estamos ante las noticias o ante un programa de divulgación científica.
Sin embargo, si es verdad que si se anuncia algo y se miente sobre sus propiedades, existen asociaciones de consumidores que pueden denunciar ese anuncio por falsedad o engaño y las autoridades pueden hacer que se retire de la televisión. Pero nadie va a denunciar a un producto de limpieza por decir que tiene el mejor olor o que deja la casa más brillante que ninguno aunque luego a nosotros nos parezca que su aroma es fétido y que todo queda empañado y emborronado.
No obstante, seguimos sintiéndonos atraídos por todo lo que se anuncia en la televisión y este sigue siendo uno de los reclamos más usados por todo tipo de productos que salen por primera vez a la venta y que, incluso en su caja, dejan leer muy claramente eso de: anunciado en tv.