Islas Cíes: la joya pontevedresa que esconde uno y mil secretos

Las Islas Cíes son uno de los destinos isleños de Galicia más codiciados por el turismo nacional e internacional. Este archipiélago de la provincia de Pontevedra es un paraje desconocido para la mayoría. Son muchas las rarezas y curiosidades que esconden las costas, bosques y playas de estas islas gallegas.

 

En primer lugar, la búsqueda de islas cies alojamiento entre los aficionados a la ornitología no es ninguna sorpresa. Este archipiélago, formado por las islas Monte Agudo, O Faro y San Martiño, es un santuario para las aves. En especial, para las gaviotas patiamarillas, ya que la mayor colonia del mundo (formada por 22 mil ejemplares) se encuentra en las Islas Cíes.

 

Por el contrario, únicamente conejos, erizos y nutrias habitan este conjunto isleño, y alrededor de 2 mil personas les hacen ‘compañía’. Aunque la presencia humana es reducida en la actualidad, existen numerosos restos de civilizaciones prehistóricas que se remontan al paleolítico, nada menos. En tiempos del Imperio Romano, este destino era conocido como las Islas de los Dioses.

 

Las Cíes forman parte del Parque Nacional Illas Atlánticas, que se enorgullece de ser el único parque nacional marítimo de nuestro país. Este privilegio, sin embargo, no ha mejorado la comunicación del archipiélago, accesible únicamente por mar y, durante la Semana Santa y el verano, por ferry. Incluso el fondeo en sus costas está sujeto a restricciones.

 

Pero además, estas islas cuentan con una de las playas más laureadas internacionalmente: Rodas, reconocida por el diario The Guardian como la mejor playa del mundo. Desde luego, la de Rodas es el arenal más extenso de las Cíes.

 

Por último, la belleza de las Islas Cíes puede apreciarse incluso bajo el agua. En efecto, los amantes del buceo y el submarinismo frecuentan este archipiélago para explorar su fondo marino y admirar especies como el pulpo o el erizo de mar.