Cuando una persona se pregunta como detectar cancer de colon sintomas y observación van de la mano. Normalmente, aquellos que tienen un familiar cercano que haya tenido esta enfermedad son los que suelen estar más atentos a este tipo de avisos que, para quienes no han tenido el problema cerca, pueden pasar desapercibidos.
Normalmente, uno de los primeros síntomas de cáncer de colon es el dolor en la parte baja del vientre que puede ir acompañado de cambios en las evacuaciones. La persona puede sufrir de diarreas o de estreñimiento que eran habituales. Es también frecuente que, tras ir al baño, se sienta la necesidad de evacuar aun cuando ya no se puede expulsar nada. El cansancio sin una causa y la pérdida de peso sin ser consecuencia de cambios en la alimentación también pueden ser pistas que indiquen que algo no va bien en el colon.
La sangre en las heces es una de las pistas más fiables, pero el problema es que muchas personas buscan sagre roja, la cual no tendría gran problema ya que normalmente procede de una hemorroide o de una fisura anal. El problema es cuando la sangre procede del interior del intestino en cuyo caso las heces se verán más oscuras y pueden presentar manchas negras. Pero no siempre son visibles para la persona.
El cáncer de colon, como estamos viendo, no ofrece pistas muy claras y pueden confundirse fácilmente con otras enfermedades, pero por suerte no es muy difícil para los médicos ver que algo puede estar mal en esa zona. Un simple análisis de sangre puede ponerlos en la pista de que algo va mal, ya que se detectará anemia. La persona tendrá bajos los glóbulos rojos o el hierro debido a las pérdidas de sangre habituales. Cuando el médico detecte esto y tras hablar con el paciente y estudiar su historial, puede solicitar una prueba de heces.
Esta prueba detectará si hay presencia de sangre en las heces y, siendo así, se enviará al paciente a realizar una colonoscopia la cual indicará al momento si hay un cáncer de colon. En cualquier caso, no hay que alarmarse ya que en la mayoría de los casos se trata de pólipos o de hemorroides internas que se pueden quitar con facilidad y que permiten al paciente continuar con su vida con normalidad. El cáncer de colon, en sus estadios iniciales, es también fácilmente operable y tienen unos índices de recuperación altos.