Preparándome para la industria 

Venía de estudiar Bellas Artes porque mi primera ambición era la pintura. Pero mientras estudiaba esa carrera empecé, poco a poco, a meterme en el mundo audiovisual gracias a un grupo de amigos. Con ellos aprendí muchas cosas a nivel práctico hasta el punto de que participé en la creación de una pequeña productora independiente que aún sigue funcionando y con la que colaboro. Pero si quería dedicarme a nivel profesional al mundo del cine debía completar mi formación.

Por eso me interesé por el Master en Dirección Artística para Cine y Series de TV en Madrid. Lo había conocido a través de una de las personas que trabajaba en la productora. Y si algo he aprendido estos años de amateur es que una cosa es el arte y otra la industria, la profesión. Y antes que artista quiero ser un profesional, por eso necesitaba integrarme en un entorno que me ofreciera esa clase de conocimiento. De ‘arte’, ya estaba sobrado, por decirlo así…

Suelo coincidir con algunos de mi excompañeros en Bellas Artes y chocamos a veces al hablar de este tema. Los más románticos no quieren saber nada de la industria, consideran que el arte debe estar en otro nivel de la realidad económica. Yo he perdido ese romanticismo. Primero, porque quiero trabajar en lo que me gusta. Y trabajar supone ganar dinero, y para ganar dinero hay que conocer el medio. Y, segundo, porque la historia nos ha demostrado que si queremos cambiar algo hay que hacerlo desde dentro. 

El Master en Dirección Artística para Cine y Series de TV en Madrid está impartido por buenos profesionales que dirigen a los alumnos hacia el mercado profesional. En este sentido, y más en un mundo como el audiovisual, las herramientas y las tecnologías son muy importantes. Estar en contacto con todo ello desde el principio ayuda a que el impacto no sea tan grande cuando sales ‘ahí fuera’ y debes batallar con unos medios siempre cambiantes. De momento, la experiencia está siendo muy positiva y espero lograr pronto mi objetivo de trabajar en lo que me gusta.