Hay una leyenda urbana que nos dice que los autónomos son algo así como seres superiores que no enferman jamás. Pero no es para nada cierto. Lo que sí es verdad es que un autónomo suele aguantar mucho antes de coger una baja porque sabe que no solo se pueden ver recortados sus ingresos, sino que muchos clientes que acuden a solicitar sus servicios se irán a la competencia cuando les diga que no puede atenderles a corto plazo.
Pero hay momentos en los que no queda más remedio que coger una baja médica y ser atendidos para recuperarse y poder continuar con la actividad. En estos casos, el autónomo necesita especialmente que la atención sea muy rápida para que el periodo de incapacidad temporal sea lo más breve posible.
Contar con un Seguro medico para autonomos va a marcar la diferencia en estos casos. Pongamos un ejemplo bastante habitual, el de una persona que sufre un fuerte dolor de espalda que lo incapacita para trabajar.
Por la Seguridad Social el proceso será el siguiente: primero acudirá a su médico de atención primaria. Este valorará si se le envía o no a un especialista y le podrá dar alguna medicación para calmar el dolor. Tras una larga espera hasta que el especialista atienda, que en algunos casos puede rondar el año, este enviará a la persona a realizarse pruebas sencillas, como radiografías. Nuevamente, se aguardará por la cita para que se valoren estas pruebas y, en caso de que sea necesario el servicio de un fisioterapeuta, nuevamente habrá que esperar hasta que se le atienda.
Con un seguro privado, el paciente solicitará cita directamente con uno de los especialistas que el seguro tenga en su cuadro médico. Este le atenderá en un plazo muy corto, normalmente lo mismo que tarda en atender un médico de atención primaria de la seguridad social. Tras esto, pedirá todas las pruebas que puedan ser necesarias de una sola vez, sin necesidad de comenzar primero por las más básicas y avanzar si estas no dan respuesta. Y, tras esto, se le dará el tratamiento que necesite, incluso el de fisioterapia si está incluido en el seguro, algo habitual.
Mientras que en el primer caso la baja puede prolongarse un año, en el segundo el paciente podría estar recuperado en tan solo un par de meses. ¿Se entiende ahora la necesidad de este tipo de seguros para autónomos? Y es que Superman, solo hay uno. El resto, enfermamos independientemente de nuestro trabajo.